REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
PODER JUDICIAL
Tribunal Sexto de Municipio Ordinario y Ejecutor de Medidas del Municipio Iribarren de la Circunscripción Judicial del Estado Lara
Barquisimeto, once de abril de dos mil veinticinco
214º y 166º
ASUNTO: KP02-V-2025-000585
DEMANDANTE: MARIBEL COROMOTO GIMENEZ, venezolana, mayor de edad, de estado civil casado, jurídicamente hábil, titular de la cedula de identidad nro. V- 14.334.631.-
ABOGADO ASISTENTE DE LA PARTE DEMANDANTE: IRIS TORREALBA, inscrita en el IPSA bajo el N° 102.783.-
DEMANDADA: EUMELIS ALEJANDRA MORILLO VIZCAYA, venezolana, mayor de edad, de estado civil soltero, titular de la cedula Identidad No. V-25.136.982.-
ABOGADO ASISTE DE LA DEMANDADA: JOSE GREGORIO LUCENA YANES, inscrito en el IPSA bajo el N° 315.907.
MOTIVO: RECONOCIMIENTO DE DOCUMENTO PRIVADO.
SENTENCIA: DEFINITIVA.-
I
NARRATIVA
Se inició el juicio mediante libelo de demanda presentada en fecha 20/03/2025, por ante la Unidad de Recepción y Distribución de Documentos del Circuito Civil de Barquisimeto, y previo el sorteo de ley correspondió conocer de la causa a este Juzgado.-
Por auto de fecha 24/03/2025, se admitió la presente demanda, por no ser contraria a las buenas costumbres al orden público o alguna disposición expresa en la Ley, y se ordenó el emplazamiento de la parte demandada, la ciudadana EUMELIS ALEJANDRA MORILLO VIZCAYA, ya antes identificado, para que compareciera en el lapso correspondiente a dar contestación a la demanda.-
En fecha 24/02/2025, comparece la parte demandada ciudadana EUMELIS ALEJANDRA MORILLO VIZCAYA, venezolana, mayor de edad, de estado civil soltero, titular de la cedula Identidad No. V-25.136.982, asistida por el Abg. JOSE GREGORIO LUCENA YANES, inscrito en el IPSA bajo el N° 315.907, donde se da por NOTIFICADA en el asunto, reconoce de manera fehaciente el contenido y sus firmas en el documento privado de contrato de COMPRA-VENTA, efectuada con la ciudadana MARIBEL COROMOTO GIMENEZ, venezolana, mayor de edad, de estado civil casado, jurídicamente hábil, titular de la cedula de identidad nro. V- 14.334.631, en tal sentido, reconozco el contenido, firma y huellas digitales del mismo y solicito a su vez se dicte sentencia en la presente demanda; acordando éste Tribunal agregarlo a los autos para que surta los efectos correspondientes y se da por terminado el presente asunto.-
II
MOTIVACION PARA DECIDIR
En primer lugar es necesario ahondar un poco en cuanto a lo que la normativa legal y doctrina han establecido referente al reconocimiento de documento privado, por tal motivo prevé el artículo 450 del Código de Procedimiento Civil, que el instrumento privado puede ser reconocido a través de demanda principal, la cual deberá tramitarse por los cauces del procedimiento ordinario.-
Con respecto a los límites tanto de la pretensión como de la contestación en causas como la de marras, el autor Ricardo Henríquez La Roche, en su obra “Código de Procedimiento Civil”, Tomo III. Segunda Edición. Ediciones Líber. Caracas, 2.004, pp. 456 y 457, apuntó lo siguiente:
1. Al igual que en la acción principal de tacha de falsedad (Art. 440), la demanda de reconocimiento de firma postula una pretensión mero declarativa…El juicio discurre según la norma, por el procedimiento ordinario. El reo debe en la contestación a la demanda, limitarse a reconocer o desconocer la firma. Si la reconoce, se allana a la demanda…Si por el contrario, el demandado desconoce la firma (sea suya o de un causante o representante suyo) en el acto de contestación a la demanda, la instrucción de la causa quedará circunscrita a demostrar, a través del peritaje caligráfico, que la firma si es auténtica.
2. En semejantes condiciones, el no menos reconocido jurista Emilio Calvo Baca, en su obra “Código de Procedimiento Civil de Venezuela”, Tomo IV. Ediciones Libra. Caracas, 2.000, pp.396 y 397, señaló lo siguiente: La demanda pidiendo el reconocimiento privado, debe cumplir con los requisitos señalados en el artículo 340 Código de procedimiento civil, el accionado en su contestación, deberá limitarse a reconocer o a desconocer la firma, si la reconoce termina la litis, si, en cambio la desconoce, la parte demandante asume la carga de la prueba de la autenticidad del instrumento…”
La actuación de las partes en casos como el que nos ocupa, debe girar únicamente en torno al hecho del reconocimiento o desconocimiento de la firma plasmada en el documento, de allí, que no le es dado a las partes discutir en el transcurso del proceso, consideraciones de fondo inmanentes al documento objeto de la pretensión, razón por la que el procesalista Ricardo Henríquez La Roche, tal como se desprende de la cita que antecede, afirmó que la demanda postula una pretensión mero declarativa, pues, en criterio de esta sentenciadora, el artículo 444 del Código de Procedimiento Civil, no prevé otra circunstancia fáctica, que el reconocimiento o el desconocimiento de la firma plasmada en el documento mismo, quedando así circunscrita igualmente la actividad del Órgano Jurisdiccional, a declarar reconocido o no el instrumento en cuestión.”
Antes de pasar a decidir es importante hacer las siguientes consideraciones doctrinales: El reconocimiento es la declaración o confesión que hace el emplazado de alguna obligación a favor de otro, o de algún instrumento privado que otorgó y tiene por objeto hacer que los instrumentos tengan plena validez en el juicio a promoverse o en el promovido si se pide dentro del juicio. Reconocido un instrumento privado, o si se declara debidamente reconocido, tiene para las partes y sus sucesores las mismas consecuencias y eficacia que un instrumento público. El reconocimiento es indivisible y tiene la misma fuerza contra el reconocedor y contra el presentante del instrumento. Es expreso cuando lo hace el obligado y tácito cuando se manda dar por reconocido en rebeldía o silencio de la parte.
Ahora bien, en el caso bajo estudio, la parte actora interpuso la demanda a fin de que la ciudadana EUMELIS ALEJANDRA MORILLO VIZCAYA, ya antes identificado, reconociera en su contenido y firma el documento privado y con fundamento en lo establecido en el artículo 450 del Código de Procedimiento Civil, donde se marcan las pautas procesales para la debida tramitación del caso en comento, se remite al juicio ordinario, establecido en el artículo 444 y 448 del citado Código Adjetivo citado, por lo que el tramite habido se encuentra ajustado a derecho. Y ASI SE DECLARA.-
De igual manera, debemos tener en cuenta que el reconocimiento es la declaración o confesión que hace el emplazado de alguna obligación a favor de otro, o de algún instrumento privado que otorgó y tiene por objeto hacer que los instrumentos tengan plena validez en el juicio a promoverse, o en el promovido si se pide dentro del juicio.-
Cuando el instrumento privado se produce con el libelo de demanda, la oportunidad para su desconocimiento es en el acto de contestación de la demanda, sin embargo, si la parte no hace uso de su derecho a desconocer el documento, o si lo hizo extemporáneamente y precluyó su oportunidad procesal, se entiende que el instrumento ha sido reconocido tácitamente. El Tribunal Supremo de justicia, en sentencia reiterada, ha sentado el concepto de documento privado en los siguientes términos:
“…Como es de doctrina, en la expresión: “instrumentos o documentos privados” se comprenden todos los actos o escritos, que emanan de las partes, sin intervención del registrador o de algún otro funcionario competente -requerida en el documento público o auténtico- y que se refieren a hechos jurídicos a los cuales pueden servir de prueba; y la condición esencial de la existencia de todo documento privado es la firma estampada en él de la persona a quien se opone. Con esa especie de documento pueden pues, probarse todos los actos que la ley no requiera su constancia en documento público, o no revista de solemnidades especiales; documentos esos que sólo tienen validez si son reconocidos o tenidos legalmente por tales.” (Sentencia de fecha 26 de mayo de 1952).
En este orden de ideas, se observa que el demandado reconoció el contenido y la firma del documento anexado al libelo, por tal motivo este Juzgador considera necesario declarar reconocido el documento objeto de la presente acción, de conformidad con lo establecido en el artículo 444 del Código de Procedimiento Civil. -
III
DISPOSITIVA
Por todos los razonamientos anteriormente expuestos este Tribunal Sexto de Municipio Ordinario Ejecutor de Medidas del Municipio Iribarren de la Circunscripción Judicial del estado Lara administrando Justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por Autoridad de la Ley, y con base en los artículos 444 y 450 del Código de Procedimiento Civil, DECLARA CON LUGAR LA DEMANDA DE RECONOCIMIENTO DE INSTRUMENTO PRIVADO incoada por la ciudadana: MARIBEL COROMOTO GIMENEZ, en contra de la ciudadana: EUMELIS ALEJANDRA MORILLO VIZCAYA, (ampliamente identificada en el fallo). En consecuencia, se declara reconocido el presente documento:
Yo, EUMELIS ALEJANDRA MORILLO VIZCAYA, venezolana, mayor de edad, soltera, titular de la cedula de Identidad N° V-25.136.932. Por medio del presente documento, declaro: Doy en venta pura y simple, perfecta e irrevocable a la ciudadana MARIBEL COROMOTO GIMENEZ, venezolana, mayor de edad, soltera, titular de la cedula de identidad Nro.V-14.334.631. Una bienhechurías de mi única y exclusiva propiedad, me pertenece por haberla construido a mis propias expensas, está constituida por las siguientes características: paredes de bloque, techos de zinc, piso de cemento, puerta y ventana de hierro, baño esta anexo en la parte de atrás y estacionamiento techado. Cercada al frente con puerta y portón de hierro, laterales lado de derecho paredes de bloque que le pertenece a Raíza Vivas y lado izquierdo cercada de palo y alambre de púa y el fondo queda el barranco, terreno ejido con un área aproximada de DOSCIENTOS CUARENTA Y SITE CON SETENTA Y SEIS CENTIMETROS CUADRADOS (247,76 M2) y se encuentra ubicada en el sector 15 parte alta Santa Eduviges, Calle Smith. Barrió La Paz, Municipio Iribarren, Parroquia Juan de Villegas, Municipio Iribarren del Estado Lara. El inmueble anteriormente identificado; se encuentra enmarcados dentro de los siguientes linderos: NORTE: con terreno ocupado por Mayerling Reinoso; SUR: con terreno ocupado por Raíza Vivas; ESTE: Calle Smith que es su frente y OESTE: con barranco. Este inmueble que por este documento vendo, está libre de todo gravamen y en caso de evicción me comprometo al saneamiento de Ley. El precio de esta venta es la cantidad de OCHENTA Y SIETE MIL CON VEINTICUATRO BOLÍVARES (BS.87.024,00), equivalente a DOS MIL CUATROCIENTOS DÓLARES AMERICANOS (2.400. $), que equivalen a la tasa oficial establecida por el Banco Central de Venezuela (B.C.V) que fueron entregados por transferencia por Zelle correo fildinyeralex2019@gmail.com a nombre de Fildinyer Morillo según número de referencia BBT223688903 por 1000$ en fecha 19/03/2024, BBT223770736 por 1000$ en fecha 20/03/2024, BBT223781713 por 200$ en fecha 20/03/2024, y 200$ dólares americanos en fecha 21/03/2024, el vendedor recibe en este mismo acto, en moneda de curso legal de la compradora. Y yo, MARIBEL COROMOTO GIMENEZ, Declaro que acepto la venta que se me hace, en los términos expuestos en el presente documento. Siendo testigos los ciudadanos JAVIER ANTONIO CORDERO CORDERO Y YUSMAIRA TERESA COLMENAREZ GIMENEZ, venezolanos, mayores de edad, solteros, titulares de las cedulas de Identidad Nros.V-19.263.669 y V-14.334.626 respectivamente. En la ciudad de Barquisimeto fecha 20/03/2024.-
No hay condenatoria en costas dada la naturaleza de la decisión de conformidad con lo previsto en el artículo 283 del Código de Procedimiento Civil.-
PUBLÍQUESE, REGÍSTRESE Y DÉJESE COPIA CERTIFICADA, del presente fallo, de conformidad con lo establecido en el artículo 248 del Código de Procedimiento Civil.
Dada, sellada y firmada en la Sala de Despacho del Tribunal Sexto de Municipio Ordinario y Ejecutor de Medidas del Municipio Iribarren de la Circunscripción Judicial del Estado Lara. En la ciudad de Barquisimeto, a los once (11) días del mes de Abril de 2.025. Años: 214º de la Independencia y 166º de la Federación.-
El Juez Suplente,
Abg. José Alexander Marquina Mendoza. La Secretaria,
Abg. María Eugenia Rincones Yajure.
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